Pedro Escobar de Iu se habrá quedado hoy muy triste, pues su amigo Vara ha dado a entender que se iría a su casa antes de pactar con Iu. Dice Guillermo Fernández Vara que el 22 no necesitará pactar con Izquierda Unida para gobernar, pues antes se iría a su "casa" que aceptar un pacto que fuera contra su "conciencia" y su ideología "socialdemócrata". Parafraseando a María Isabel: Guillermo "antes muerto que sencillo".
Y es que la verdad debe de ser muy duro para el Varismo SocioListo verse obligado a pactar para tener que compartir el poder, pues de eso trata la "conciencia" y la ideología "socialdemócrata" de Guillermo.
"Conciencia", ideología "socialdemócrata" y "política de valores" que se muestra a las claras en FEVAL: una oficina para los altos directivos con spa, jacuzzi y squash.
Por cierto, han sido pocos los medios de comunicación regionales que han abordado con la atención debida esta noticia. A mi personalmente me ha sorprendido que hayan sido más los medios de comunicación de carácter nacional los que hayan atendido esta noticia que los extremeños. Ni siquiera, a nivel político, Iu ha dicho nada al respecto. ¿Será que a Pedro Escobar también le gustaría saborear las mariscadas como a su compañero de coalición y portavoz de Iu Sevilla Antonio Rodrigo Torrijos?
Los trabajadores de la FEVAL han alertado de algunas cuestiones, a través de un informe-denuncia remitido a Vara, que da a conocer la enorme "conciencia" e ideología "socialdemócrata" de los SocioListos extremeños.
El siguiente debe de ser el "documento B" de la "política de valores" (decálogo de la "buena gestión") de Guillermo.-
- - Contrataciones irregulares con socios y miembros de los órganos rectores (copados casi en exclusiva por altos cargos del Psoe) y que nunca han salido a concurso y que se adjudican año tras año a las mismas empresas.
- - Anomalías del personal directivo, compuesto por ex altos cargos del Psoe que han adornado sus nóminas con sueldos astronómicos.
- - Omisiones y alteraciones contables.
- - Pagos al director de FEVAL, por parte de la institución, de los recibos mensuales de un canal de TV.
- - Despilfarro en instalaciones, como las del nuevo centro tecnológico, dotado para que los directivos pueda disfrutar de la última generación de jacuzzi, spa, pistas de squash y cocina de lujo.
- - Ausencia de fiscalización de las cuentas que no se presentan al Tribunal de Cuentas ni se permite que sean investigadas por la Asamblea.
- - Mariscadas de casi 500 euros que se trasladaban a Mérida en razón del contrato que la Presidencia de la Junta mantiene con FEVAL para suministro de catering. También se remitían a un lugar identificado con las siglas S. D., que coincidirían, según el informe de los trabajadores, con Santo Domingo de Olivenza, lugar de residencia del ex presidente Ibarra.
- - La utilización de material y personal de FEVAL para las fincas privadas del director y el subdirector, José Luis Viñuela, diputado en la Asamblea de Extremadura y ex alcalde de Don Benito y José Villa, junto al pantano de Orellana.
- - El abono, por parte de FEVAL, de las facturas emitidas de forma habitual por una conocida marisquería de Don Benito y "disfrutadas por el director y el subdirector, entre otros, en casas particulares" incluidos los fines de semana.
- - Gestión, llevada a cabo por la dirección, para poner a su propia disposición todo el capital de FEVAL, tanto patrimonial como humano, y también económico; así como toda una infraestructura empresarial de capital público al 100% colocada al servicio de un único interés, el personal.
"Conciencia" e ideología "socialdemócrata" de Vara que creo, a estas alturas de la película, que sólo podrá aclarar Convergencia por Extremadura (CEx), pues con nosotros no necesitaría pactar, ni se lo vamos a pedir; pues lo que deseamos es que se vaya directamente a su casa, dado que pensamos que los Partidos del Turno (PP$o€) son las dos caras de la misma moneda ("tanto monta monta tanto") que practican y aplican las mismas políticas neoliberales al servicio de los mercados financieros especulativos (y en provecho propio) y contra de la ciudadanía.
Por Javier Caso Iglesias, activista social y miembro de Convergencia por Extremadura (CEx).
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