Ya saben los que nos conocen que, por nuestra parte, defendemos que todo el mundo se pronuncie y exprese tal y como es, tal y como ve y observa las cosas. En esto mantenemos unos principios antagónicos a esos partidos tradicionales que intentan controlar hasta la más mínima expresión de cualquiera que públicamente se pronuncie. Para nosotros, el derecho inalienable e indisponible a la libertad de expresión, entra dentro de nuestra normalidad. Nosotros respetamos las opiniones personales de cada cual, estas no nos molestan y animamos a que todo el mundo se sienta libre para expresarse tal cual es. Diferenciamos, como he dicho en otras ocasiones, entre las opiniones de las personas que conforman Convergencia por Extremadura, o la de los partidos que la integran, de las propias de la coalición. Nosotros no compartimos esas metodologías que utilizan ciertas organizaciones que intentan encorsetar a todos y ponerles bozal para que no hablen.
Bajo esta amplia perspectiva de libertad expreso lo siguiente.-
Le decía esta misma tarde a un amigo que mi opinión, sobre los proyectos de cooperación política, es similar a la que él mantiene; la diferencia está en cómo se llevan a cabo y articulan esos proyectos. A mi no me gusta imponer mis puntos de vista, ni condicionar mi apoyo a un proyecto a si mis puntos de vista se tienen en cuenta. Lo mío es sugerir y luego que decidan los demás. No me gusta votar, prefiero el consenso. Soy más de convencer que de vencer, esto es, galileiano en el sentido de que "no se puede enseñar nada a nadie, solo ayudarlo -si se deja-, a que lo piense con su propia cabeza". En base a estos principios es por lo que recelo de las tramas conspirativas y de los acuerdos urdidos a la espalda de unos u otros. Prefiero que todo sea transparente.
Nuestro proyecto seguramente tendrá sus carencias y limitaciones, por eso lo hacemos con mano tendida, para que todo el que lo desee, desde la buena voluntad, pueda implicarse y corregir esas carencias y limitaciones. Por eso optamos por la opción de la redefinición cada vez que esta sea necesaria y, por acuerdo, así lo entendamos.
Le decía, esta misma tarde, a este amigo que, en relación a Izquierda Unida, pienso que no creen sinceramente en los procesos de cooperación política. Así también lo opina Carlos Taibó, profesor de Ciencia Política en la Universidad Autónoma de Madrid, en un magnífico artículo titulado ¿Refundación de la izquierda?: los activistas de los movimientos sienten un recelo biológico ante las ofertas que llegan desde Izquierda Unida (http://blogs.publico.es/dominiopublico/2534/%C2%BFrefundacion-de-la-izquierda/). No obstante, con el tiempo, entenderán que estos procesos son necesarios y terminarán, no lo dudo, sumándose a los mismos si no quieren desaparecer de la escena política. Ahora mismo es una locura que dos opciones políticas (CEx e IU) opten por el mismo espacio, pero les toca a ellos (IU) mover ficha; les toca a ellos cambiar ese discurso de creerse vanguardia y fuerza hegemónica por otro más humilde que reconozca a los demás, que potencie a los demás, que arraigue en la ciudadanía y no recele de ella; así como tampoco recele de otras opciones políticas que también la representan. Desde la humildad se pueden conseguir muchas cosas, desde la soberbia ninguna; pues todo se termina volviendo en contra.
Como le trasladaba el otro día a mis compañeros de CEx, la decisión sobre nuestros candidatos a alcaldías será, como todas las nuestras, fruto del acuerdo y del consenso entre todos los que conformamos Convergencia por Extremadura. Buscando candidatos externos a la coalición si así lo estimaran, por acuerdo unánime, las organizaciones que conforman CEx. Pero resaltando que lo prioritario es dar proyección a aquellas personas y entidades que compartimos el criterio metodológico de puzzle y que, por ello, sumamos juntas dentro de Convergencia por Extremadura.
Conmigo concretamente ya se han puesto en contacto personas de diversas localidades, personas que ya han mostrado su predisposición a sumarse al proyecto; personas que reclaman ser predicado en las candidaturas y no simples adjetivos. Por tanto, cuando llegue el momento, CEx decidirá valorando lo propio que apuesta por la suma y la integración por encima de lo externo que estos criterios de generosidad, humildad y puesta a disposición de los demás, no comparte.
Realidad diferente es si se apreciara, cosa que se valoraría, que otras personas y entidades optaran por un claro y decidido posicionamiento en favor de ese criterio metodológico de puzzle en el que nadie sobra si su deseo es sumar.
Como digo más arriba, estoy totalmente convencido que, con el tiempo, esas personas y entidades entenderán que estos procesos son necesarios y terminarán, no lo dudo, sumándose a los mismos si no quieren desaparecer de la escena política. Ahora mismo es una locura que dos opciones políticas (CEx e IU) opten por el mismo espacio, pero les toca a ellos (IU) mover ficha; les toca a ellos cambiar ese discurso de creerse vanguardia y fuerza hegemónica por otro más humilde que reconozca a los demás, que potencie a los demás, que arraigue en la ciudadanía y no recele de ella; así como tampoco recele de otras opciones políticas que también la representan. Desde la humildad se pueden conseguir muchas cosas, desde la soberbia ninguna; pues todo se termina volviendo en contra.
Seamos, como recomiendan los compañeros de P36, coadyuvantes para conectar. Es obvio que no es fácil porque el desarrollismo ha inoculado el virus de la competencia, la desconfianza, el individualismo y el mercantilismo en la política. Pero la cooperación política tiene como principal requisito cambiar la forma de entender la política y las relaciones políticas, sobre la base de la confianza y la generosidad.
Nuestro proyecto seguramente tendrá sus carencias y limitaciones, por eso lo hacemos con mano tendida, para que todo el que lo desee, desde la buena voluntad, pueda implicarse y corregir esas carencias y limitaciones. Por eso optamos por la opción de la redefinición cada vez que esta sea necesaria y, por acuerdo, así lo entendamos.
Le decía, esta misma tarde, a este amigo que, en relación a Izquierda Unida, pienso que no creen sinceramente en los procesos de cooperación política. Así también lo opina Carlos Taibó, profesor de Ciencia Política en la Universidad Autónoma de Madrid, en un magnífico artículo titulado ¿Refundación de la izquierda?: los activistas de los movimientos sienten un recelo biológico ante las ofertas que llegan desde Izquierda Unida (http://blogs.publico.es/dominiopublico/2534/%C2%BFrefundacion-de-la-izquierda/). No obstante, con el tiempo, entenderán que estos procesos son necesarios y terminarán, no lo dudo, sumándose a los mismos si no quieren desaparecer de la escena política. Ahora mismo es una locura que dos opciones políticas (CEx e IU) opten por el mismo espacio, pero les toca a ellos (IU) mover ficha; les toca a ellos cambiar ese discurso de creerse vanguardia y fuerza hegemónica por otro más humilde que reconozca a los demás, que potencie a los demás, que arraigue en la ciudadanía y no recele de ella; así como tampoco recele de otras opciones políticas que también la representan. Desde la humildad se pueden conseguir muchas cosas, desde la soberbia ninguna; pues todo se termina volviendo en contra.
Como le trasladaba el otro día a mis compañeros de CEx, la decisión sobre nuestros candidatos a alcaldías será, como todas las nuestras, fruto del acuerdo y del consenso entre todos los que conformamos Convergencia por Extremadura. Buscando candidatos externos a la coalición si así lo estimaran, por acuerdo unánime, las organizaciones que conforman CEx. Pero resaltando que lo prioritario es dar proyección a aquellas personas y entidades que compartimos el criterio metodológico de puzzle y que, por ello, sumamos juntas dentro de Convergencia por Extremadura.
Conmigo concretamente ya se han puesto en contacto personas de diversas localidades, personas que ya han mostrado su predisposición a sumarse al proyecto; personas que reclaman ser predicado en las candidaturas y no simples adjetivos. Por tanto, cuando llegue el momento, CEx decidirá valorando lo propio que apuesta por la suma y la integración por encima de lo externo que estos criterios de generosidad, humildad y puesta a disposición de los demás, no comparte.
Realidad diferente es si se apreciara, cosa que se valoraría, que otras personas y entidades optaran por un claro y decidido posicionamiento en favor de ese criterio metodológico de puzzle en el que nadie sobra si su deseo es sumar.
Como digo más arriba, estoy totalmente convencido que, con el tiempo, esas personas y entidades entenderán que estos procesos son necesarios y terminarán, no lo dudo, sumándose a los mismos si no quieren desaparecer de la escena política. Ahora mismo es una locura que dos opciones políticas (CEx e IU) opten por el mismo espacio, pero les toca a ellos (IU) mover ficha; les toca a ellos cambiar ese discurso de creerse vanguardia y fuerza hegemónica por otro más humilde que reconozca a los demás, que potencie a los demás, que arraigue en la ciudadanía y no recele de ella; así como tampoco recele de otras opciones políticas que también la representan. Desde la humildad se pueden conseguir muchas cosas, desde la soberbia ninguna; pues todo se termina volviendo en contra.
Seamos, como recomiendan los compañeros de P36, coadyuvantes para conectar. Es obvio que no es fácil porque el desarrollismo ha inoculado el virus de la competencia, la desconfianza, el individualismo y el mercantilismo en la política. Pero la cooperación política tiene como principal requisito cambiar la forma de entender la política y las relaciones políticas, sobre la base de la confianza y la generosidad.
Lo nuestro ha de ser, como nos recomienda el Sup Marcos: "acompañar sin vanguardizar".
Como digo más arriba, lo mío es sugerir y luego que decidan los demás. Estas son simplemente mis opiniones.
Por Javier Caso Iglesias, Portavoz de Iniciativa Socialista de Extremadura
http://javiercasoiglesias.blogspot.com/2010/10/cooperacion-politica-desde-la-humildad.html
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